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| Manifestantes antiglobalización tras una manifestación en las islas Seicheyes, después de cobrar los emonumentos pertinentes, dietas, etc. |
El mundo está atónito ante los surrealistas sucesos que están
acaeciendo en el panorama económico europeo. Sarkozy y Lord Turner deben estar
emporraos, alucinan y nos hacen alucinar con sus declaraciones de estos días.
Resulta que dos de los máximos representantes del neoliberalismo europeo, que
con el permiso de Estados Unidos podemos decir que mundial, lanzan en sus
discursos propuestas robadas a los grupos antiglobalización. Una de las señas
de identidad, de las propuestas de estos grupos es la implantación de la
denominada tasa Tobin, en honor al Nobel de Economía cuyo apellido da nombre a
la tasa, no quiero decir con esto que el tal Tobin perteneciese a este
movimiento anticapitalista). Otras propuestas por el estilo son la RBC, renta básica
ciudadana, exigencia según la cual todos los estados deben proporcionar una
renta a sus ciudadanos solo por eso, por ser ciudadanos. También tenemos el 0,7
% del PIB de los estados para favorecer el desarrollo de los países del tercer
mundo, etc. Pero no olvidemos que estas propuestas, y solo son eso, propuestas,
son colores de la bandera antiglobalización.
Vamos a lo que vamos, Sarkozy por un lado, el francés,
(conocido por ser el marido de una famosa cantante francesa, lo que se dice un
pivón) y Lord Turner, (máxima autoridad supervisora de la banca británica y que
no sabemos quien es su mujer, pudiendo ser o no pivón) se han pronunciado a
favor de la implantación de la Tasa Tobin. Esta tasa, consiste en la implantación
de un “impuesto” a las transacciones financieras transnacionales. La tasa
impositiva es del orden del 0,1 al 0,25 %, o sea entre 10 y 25 centavos por
cada dólar en cada transacción; y se dirige a desestimular el flujo de
capitales a corto plazo, pues estos obtienen un porcentaje de ganancias muy
reducido a corto plazo y este impuesto haría prácticamente desaparecer esta
especulación a corto plazo. La tasa de inversiones a largo plazo, más de un
año, quedaría prácticamente intacta. La recaudación por este concepto se puede
estipular en unos 1000 millones de dólares anuales, que se podían dirigir a los
países menos desarrollados o en vías de desarrollo. Esta al menos es la filosofía
de esta tasa, cosa que no creo que fuese la intención de estos dos elementos
antes mencionados, ya que por un lado, ambos, se erigen en gigantes y gallifantes,
sumos pontífices del neoliberalismo, de la globalización económica, del
gobierno de los mercados sin fronteras, y desde esta posición de poder alzan
una de las consignas “antiellos”, “antitodoloqueestosrepresentan”, haciéndola
propia y dejando descolocados hasta los leones del puente de piedra de
Zaragoza, que casi se caen del pedestal que los soporta.
A ver si al final estos estrategas de la especulación van a
ser renunciantes hindúes o hermanitas de la Caridad de la congregación de la
Madre Teresa de Calcuta y su verdadero interés es el bien de la humanidad, en fin,
quién lo iba a decir.
Juan Carlos Vázquez
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